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Mira estos videos y responde a las preguntas que planteo al final.

Sobre el chimpancé Washoe (1965-1972), entrenado por los Gardner:

-Lengua de Signos Americana (LSA) adaptada que aprendió por imitación y condicionamiento: se le presentaban objetos y sus cuidadores moldeaban sus manos hasta conseguir la forma del signo. En su presencia estaba prohibido hablar inglés.

-Resultados: 132 signos en tres años; algunos de ellos parecen creados intencionalmente mediante asociación metonímica: “water bird” para ‘cisne’.

-Murió en noviembre de 2007 a la edad de 42 años.

Sobre el gorila hembra Koko (1972), entrenada por Patterson:

-Utiliza el lenguaje de signos y comprende el inglés oral.

-Patterson asegura que conoce unos 500 signos y que es capaz de inventar otros, como “finger bracelet” para ‘anillo’. También muestra cierta creatividad e intuición silábica, porque es capaz de rimar en inglés.

-Sustituye algunos signos que no conoce por signos que representan palabras homónimas: “eye” por “I”; “know” por “no”.

-Utiliza signos para insultar a la gente y señalar cosas que no le gustan.

Sobre el chimpancé hembra Lana, entrenada por D. Rumbaugh:

-Fue entrenada para comunicarse a través de un ordenador. Lo signos que utiliza se denominan lexigramas (combinaciones de 9 figuras geométricas diferentes).

-Consiguió aprender a usar el teclado correctamente mediante un aprendizaje basado en el estímulo-respuesta.

-Kanzi, Panbanisha, Sherman y Austin han sido entrenados con el mismo sistema.

Contesta a las siguientes cuestiones:

  • ¿Cuál es el enunciado más largo que logran emitir o producir? ¿Cuál es la media?
  • ¿Qué porcentaje de oraciones entendió Koko sin la ayuda de la Dra. Patterson?
  • ¿Hasta qué punto son relevantes las respuestas de Koko?
  • ¿Interrumpe Koko a sus interlocutores?
  • ¿Cuáles son sus temas habituales de conversación?
  • ¿Te ha parecido que en algún momento Koko repite o imita el signo que previamente ha hecho la Dra. Patterson?
  • ¿Existen pruebas objetivas de que Koko entiende exactamente lo que se le dice? ¿Qué diferencias hay entre estas conversaciones y una humana?

Según los experimentos que acabas de ver, ¿concluirías que los simios pueden adquirir el lenguaje humano?

Lenguas artificiales

Borges: “El idioma analítico de John Wilkins” http://www.ciudadseva.com/textos/teoria/opin/borges3.htm

1. ¿Qué quiere decir Borges cuando afirma que «todos los idiomas del mundo son igualmente inexpresivos»? ¿Por qué excluye las palabras compuestas y las derivaciones?
2. ¿Cuál sería la diferencia más notable que existe entre las lenguas naturales y el idioma analítico de Wilkins?
3. ¿Podrías comentar en qué consiste la arbitrariedad del signo lingüístico? Si la lengua analítica de Wilkins carece de arbitrariedad, ¿puede considerarse realmente una lengua?
4 ¿Por qué crees que es necesaria una clasificación del universo previamente a la construcción de una lengua analítica como la de Wilkins? ¿Podrías intentar, siguiendo tus propios criterios, una clasificación elemental del universo? Compara el resultado con la ordenación conceptual que aparece en la parte sinóptica del Diccionario ideológico de Julio Casares. A la vista del cotejo, ¿coincides con Borges en la idea de que «no hay clasificación del universo que no sea arbitraria y conjetural»?
5. Borges se refiere a otras lenguas imaginarias en su narración «Tlön, Uqbar, Orbis Tertius», incluida en su libro Ficciones. Busca el texto y compara la estructura de esas lenguas del planeta Tlön con la de tu lengua materna.

El español en el mundo

El origen del lenguaje

Después de tantos fracasos al querer identificar qué nos distingue de los animales -se ha recurrido a la capacidad de fabricar herramientas, al poder simbólico y a la comunicación, entre otros-, el antropólogo Chris Knight parece haber dado en la diana. Su hipótesis revolucionaria da una explicación para el origen del lenguaje en los humanos y explica porqué nuestra comunicación es tan diferente de la de los animales que también se comunican entre sí. Si analizamos el mundo animal -especialmente el de los primates- en búsqueda de algo tan impredecible, libre y creativo como el lenguaje, quizá resulte difícil encontrar algo similar. El punto de partida para esta comparación podría ser el instinto de juego que tienen los animales, sobre todo cuando todavía son cachorros. Cuando dos animales juegan, ambos analizan lo que piensa el otro y se comunican, pero ello no constituye un lenguaje. En el mundo animal, se juega en la infancia como una preparación para la realidad adulta, mientras que en el ser humano, el juego durante la infancia es algo más que eso.
En el mundo animal, el sexo es una fuente enorme de conflictos y de violencia. Ningún animal renuncia fácilmente a la posibilidad de aparearse, especialmente los machos. Por ello, cuando dos gorilas compiten por una hembra, no se muestran juguetones sino que inician una pelea. Así, el juego de lucha en el período preadulto no se transforma -como en el caso de los humanos- en lenguaje y cultura que se transmiten de una generación a la siguiente sino que es una preparación para las peleas reales y, por ello, el juego se limita al período pre-sexual del animal.

Haz una reseña de los vídeos siguientes:

Las lenguas de signos

«Ha habido una primera etapa en la que ha sido necesario demostrar lingüísticamente que las lenguas de signos eran sistemas completos de comunicación equiparables a las lenguas orales. Esto ha provocado, como contrapartida, el intento de los lingüistas por descubrir paralelismos en las lenguas de signos para los principales fenómenos de las lenguas orales, con la finalidad también de encontrar validez empírica en estas lenguas para las principales teorías e hipótesis lingüísticas del momento. Sin embargo, en la década de los noventa, estamos asistiendo a una nueva etapa en la que ciertos autores abogan por resaltar los aspectos más peculiares de las lenguas de signos: aspectos que son una consecuencia de las características propias del canal viso-gestual». (Esperanza Morales, «Lingüística de las Lenguas de Signos: Perspectiva histórica», en Carlos Hernández Sacristán & Monserrat Veyra (eds.), Lenguaje, cuerpo y cultura, Edicions Culturals Valencianes, S.A., 2000, p. 1).

Como cualquier código de comunicación, las lenguas de signos varían en el tiempo. Uno de los ejemplos más curiosos es el Idioma de Señas de Nicaragua (busca información sobre este tema, pero puedes empezar con http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_3664000/3664484.stm).

Para saber más:

Gastón Ricao, A. «¿Señas o signos?: evolución histórica». En http://www.ucm.es/info/civil/bardecom/docs/signos.pdf

Herrero, Á: «Una aproximación morfológica a las construcciones clasificatorias en la lengua de signos española». En http://rua.ua.es/dspace/bitstream/10045/6135/1/ELUA_18_08.pdf

Oviedo, A. «¿Lengua de señas, lengua de signos? Razones para una denominación. En http://www.cultura-sorda.eu/resources/Oviedo_+Lengua_de_senas_lengua_de_signos.pdf

OTROS MATERIALES INTERESANTES

http://www.cervantesvirtual.com/seccion/signos/ (enlaces a muchas publicaciones sobre la lengua de signos)

http://www.sematos.eu/lse-1.html (una excelente página con numeros enlaces y un video-diccionario de la LSE)

Buenas noches (B8eTw_GMOV0), y que lo disfrutes

Discute si los gestos que aparecen en el vídeo están lo suficientemente codificados. En función de tu respuesta, ¿crees que la gesticulación requiere estar acompañada de un mensaje verbal para transmitir matices o especificar significados?

¿A qué categoría pertenecen los «gestos» del vídeo? ¿simples gestos, emblemas, pantomimas o lengua de signos?

Nos podemos malentender usando la misma lengua y podemos comunicarnos usando lenguas distintas. Todo depende de si existe o no un proyecto de entendimiento que vaya más allá del lenguaje. (J. A. Marina, La selva del lenguaje)


La mort d’una llengua no és tan sols la pèrdua d’un mitjà de comunicació, sinó un sistema simbòlic creat al llarg del segles per una comunitat que ha de tenir el pret a interpretar el món de la seva manera. (C. Junyent, Vida i mort de les lléngües)

La maldición de la diversidad lingüística se remonta al mito de la torre de Babel. Como recordaréis, el mito narra el castigo que Yavhé impuso a la ambición de la raza humana empeñada en levantar una altísima torre para rozar el sueño de la divinidad. A partir de entonces surgió el mito de la pérdida de la lengua adámica, perfecta en su relación con las cosas, y el pecado de la dispersión lingüística. Durante siglos, y hasta el XIX, la cultura occidental se nutrió de las consecuencias negativas de la diversidad tanto en los trabajos gramaticales, como en la elaboración de lenguas artificiales utópicas. En la cultura griega, por ejemplo, se creía que un Nomoteta (un supremo “otorgador” de nombres) había dado a las cosas un nombre exacto que los hombres, especialmente los poetas, habían desdibujado al modificarlo con el uso. En el Renacimiento se defiende que las lenguas nacionales son lenguas vulgares, en tanto que han corrompido la lengua latina de la que proceden; por tanto, las lenguas sólo serán perfectas si se aproximan al modelo latino. En la Enciclopedia de Diderot se habla de lenguas perfectas frente a lenguas salvajes y primitivas; clasificación que completará de manera impresionista Rousseau al diferenciar entre las lenguas de los países del norte (lenguas claras, aptas para la ciencia y el razonamiento) y las lenguas de los países del sur (lenguas oscuras, destinadas a la religión o a las leyes). Y en el XIX, la tradición comparativa alemana separa radicalmente las lenguas en función de que posean o no formas gramaticales, característica que las habilita para el pensamiento abstracto o para el pensamiento práctico, respectivamente. Nada más lejos de la realidad, como podéis suponer (¿o no?).
Pero no hace falta remontarse a la tradición lingüística para detectar prejuicios. Cuando escuchamos una lengua que no entendemos, no es infrecuente oír apelativos como “bereber”, “hotentote” o la expresión “no hablan en cristiano”; y al bullicio o griterío confuso lo denominamos “algarabía”, que etimológicamente significa tan sólo ‘lengua árabe’ (al arabiyya); pero como esta lengua nos suena extraña, a griterío confuso, es fácil la extensión significativa. Por último, pensemos que la idea de que en las comunidades nativas la lengua debía ser más rudimentaria y elemental que en las lenguas occidentales nos “educó” durante nuestra infancia a través de las famosas películas de Tarzán, en las que -recordemos- los nativos utilizaban un cómico sistema de infinitivos sin conjugar. Todavía hoy hay quien se dirige a los extranjeros elevando extrañamente la voz y pronunciando de manera pausada, como si pretendiera que el estruendo fónico se alzara en lengua universal.
No es tarea fácil terminar con estas actitudes, máxime cuando el desprecio por la lengua de los demás supone el aprecio exagerado de la lengua propia. Así, el paso previo para reconocer el enorme valor y riqueza de la diversidad es identificar los prejuicios lingüísticos y disponer entonces de criterios sólidos frente a la ciega superstición.
A continuación, os ofrezco una lista de prejuicios lingüísticos para que, además de hacer un examen de conciencia del que espero que salgáis más o menos airosos, los comentéis brevemente (esto es, evidentemente, una «pequeña» parte del examen multifrutas que debéis entregar en junio). Ahí van:

1. Hay lenguas fáciles y lenguas difíciles
«Determinados pueblos tienen la reputación de estar dotados para las lenguas; los eslavos, por ejemplo. Por el contrario, los franceses se consideran generalmente a sí mismos como poco dotados. Este tipo de juicio se une al vasto catálogo de estereotipos nacionales o raciales: los negros son perezosos, los escoceses son avaros, los ingleses son flemáticos.» (M. Yaguello, Catalogue des Idées reçues sur la langue).

2. Hay lenguas que suenan y lenguas que chirrían
«Aquellas lenguas que van más lejos en el arte de conseguir mucho con pocos medios están en un lugar superior.» (O. Jespersen, Language. Its nature, development and Origin)
«El idioma castellano tiene grandes recursos para escribir. Tiende, eso sí, a la anfibología y hay que evitarla. El francés posee menos rigor, pero es más preciso y seguro. Nosotros tenemos más sonoridad; ellos más finura y hondura.» (A. Cuartas, Curiosidades del lenguaje).

3. Hay lenguas de muchos y lenguas de pocos
«Una sola lengua no se convierte en lengua global a causa de sus propiedades estructurales intrínsecas, o a causa del tamaño de su vocabulario, o a causa de haber sido el vehículo de una gran literatura en el pasado, o a causa de haber estado asociada en el pasado con una gran cultura o religión […] Una lengua se convierte en internacional por una razón fundamental: el poder político de su gente, especialmente su poder militar. » (D. Crystal, English as a global language)

4. Hay lenguas con muchas palabras lenguas con pocas
«Las lenguas sin libros son lenguas analfabetas y no basta con proveerlas de gramáticas y diccionario, que eso siempre es posible, para convertirlas de la noche a la mañana, en lenguas de cultura, porque la cultura de la que una lengua es manifestación, suele ser fruto de un largo acarreo de siglos y se sostiene con pilares de volúmenes escritos, se fundamenta en la enorme extensión de textos acumulados.» (G. Salvador, Política lingüística y sentido común)
«A los buenos escritores en euskera, sí les daría un consejo, es que pasasen al español […] Creo que van a tener una acogida mucho más gratificante, más posibilidades de desarrollo, en una lengua mucho más rica, más maleable, una lengua literaria, entiéndase, no en una lengua en sentido general. Ahora ¿que quieren escribir en euskera? Hay tanto escritor malo en euskera que es preferible que lo hagan es español.» (J. Juaristi, El Correo español, 25-09-1987)

5. Hay lenguas que mueren y lenguas que se dejan morir
«Cada lengua encierra la visión del mundo de sus hablantes: cómo piensan, qué valoran, en qué creen, cómo clasifican el mundo que les rodea, cómo organizan sus vidas. Cuando muere una lengua se pierde parte de la cultura humana para siempre.» (W. Dixon, The rise and fall of languages)
«La lengua, para su pueblo, no es sólo un instrumento de entendimiento, un archivo y colección de las costumbres de una colectividad. El idioma es la expresión de la imagen particular del mundo que se ha creado esa colectividad; la historia viva de un pueblo, la levadura de su vida interior. El que abandona la lengua de sus padres, reniega de su alma.» (I. Zaldua, Noiz Arte Iraungo Du Euskarak?)

http://www.ethnologue.com/

BADIA, Ignasi. Diccionari de les llengües d’Europa. Barcelona: Enciclopèdia
Catalana, 2002.
JUNYENT, Carme. Gimcana de les llengües. Barcelona: Octaedro, 2002.
Mapa L’Europa de les llenguües, editado por CIEMEN (2003)
http://www.ciemen.org
NETTLE, David y ROMAINE, Suzanne. Vanishing Voices. The Extinction of the
World’s Languages
. Oxford University Press, 2000.
SKUTNABB-KANGAS, Tove. Linguistic Genocide in Education or Worldwide
Diversity and Human Rights?
Lawrence Erlbaum, 2000.
WURM, Stephen (ed.). Atlas of the World’s Languages in Danger of Disappearing.
París: UNESCO, 2002.

Este es un documental en siete capítulos sobre la diversidad lingüística del mundo. En nuestro planeta existen aproximadamente unas 6.500 lenguas y una se extingue cada 14 días. El mundo parece destinado a perder la mitad de su herencia cultural dentro del próximo siglo.
¿Por qué desaparecen las lenguas y cuál es la importancia de esta pérdida?
La película examina las lenguas como un elemento social, político y cultural. Sin una lengua, cualquier forma de estructura social humana sería inconcebible; además, las lenguas contituyen la base de nuestras relaciones con los demás. Pero, ¿por qué algunas lenguas se convierten en lenguas de comunicación universal mientras que otras están a punto de desaparecer? ¿De qué manera están conectadas nuestra lengua y nuestra identidad?, ¿qué se siente al ser la última persona que habla una lengua en concreto?, ¿cómo se documenta una lengua?, ¿cómo se desarrolla?, ¿cómo se transmite el significado lingüístico y cultural de una lengua a otra?
Puedes responder a las preguntas que aparecen en la entrada Por los mundos del lenguaje (o cómo acabar con los prejuicios lingüísticos).

El silbo de La Gomera

El silbo gomero parece tener su origen en las lenguas bereberes prehispánicas. En el primer estudio fonético sobre este código (Ramón Trujillo, El silbo gomero: análisis lingüístico, 1978) se contabilizaban dos vocales y cuatro consonantes; pero otros estudiosos posteriores (Classe, Meyer) defienden la existencia de cuatro vocales (a, e, i, o). La reducción fonológica implica, en algunos casos, un elevado grado de ambigüedad léxica que ha de resolverse en función del contexto lingüístico (normalmente muy reducido respecto a los temas de intercambio) y de la reiteración de turnos conversacionales (pregunta-respuesta). En el año 2005, la revista Nature publicó un trabajo titulado «Linguistic perception: Neural processing of a whistled language» (Manuel Carreiras, Jorge López, Francisco Rivero y David Corina) en el que se demostraba que las áreas del cerebro asociadas al lenguaje hablado se activaban también al escuchar el silbo.

Puedes leer más en http://valencia.abc.es/hemeroteca/historico-06-01-2005/abc/Sociedad/el-silbo-gomero-es-procesado-por-nuestro-cerebro-como-un-lenguaje-hablado-mas_9631310210918.html

En estos enlaces se incluyen documentales muy interesantes sobre lenguas silbadas:

BIBLIOGRAFÍA

Classe A. (1957). «The whistled language of La Gomera». Scientific American, 196, 111-124.

Carreiras M, López J, Rivero F, Corina D (2005). «Linguistic perception: neural processing of a whistled language», Nature 433 (7021): 31-32.
Díaz Reyes, D. (2008). El lenguaje silbado en la Isla de El Hierro. Excmo. Cabildo Insular de El Hierro. Santa Cruz de Tenerife.

Meyer, J., Meunier, F., Dentel, L. (2007). Identification of natural whistled vowels by non whistlers. Proceedings of Interspeech 2007.

Trujillo, R., et al (2005). EL SILBO GOMERO. Materiales didácticos. Consejería De Educación, Cultura y Deportes Del Gobierno De Canarias – Dirección General De Ordenación e Innovación Educativa.
Trujillo, R. (1978). EL SILBO GOMERO: análisis lingüístico. Santa Cruz de Tenerife: I. Canaria.